Creemos que ha llegado la hora que todas las autoridades y representantes, actuemos en conjunto en una forma de proteger a la comuna y sus habitantes. Son muchos años de producción de riqueza en la comuna y no se ve reflejado en el desarrollo de esta, aún con muchos niveles de pobreza, sin terrenos para construir viviendas, carentes de los mínimos servicios para atender a la comunidad, alto nivel de consumo de drogas, tomas de terrenos, falta de saneamiento básico y una comunidad rural aislada, donde aún falta agua potable. Incluso una comuna engañada por quienes han pretendido apoyarlas en su lucha medioambiental, pero que solo buscan beneficios personales, sin considerar a la gente.
Hoy hemos entregado nuestro respaldo al alcalde Zúñiga, que ve con angustia como se producen estos eventos y requiere de respuestas claras para tranquilizar a la comunidad. Esperamos que las autoridades competentes como Sernageomin, la Seremi de Minería, puedan entregar un informe a la brevedad para constatar el nivel de deterioro que está sufriendo el subsuelo en la comuna.
Finalmente, emplazamos a la empresa Minera Candelaria que de las explicaciones necesarias, adopte medidas concretas y se ponga del lado de las autoridades locales y la comunidad, para evitar que hechos tan lamentables como estos sigan ocurriendo.
Los municipios de Atacama estamos más unidos que nunca, porque vemos otro hecho más del abuso medioambiental que a lo largo de la historia nos hacen sufrir quienes solo se preocupan de la extracción de nuestra riqueza, para finalmente, solo dejarnos pasivos ambientales, trabajadores enfermos y de desarrollo y bienestar para nuestras familias, casi nada.